Mi persona Favorita

Tengo que algo que contarte. Sé que 2022 ha estado plagado de tropiezos, errores y en ocasiones victorias pírricas. Nunca dirás que ha sido un mal año, porque no es lo cierto. Lo cierto es que eres un humano, un humano plagado de espléndidas cualidades y claroscuros. Miras atrás, al pasado, para encontrarte con ese niño, con sus sueños y es verdad que más bien pocos se han cumplido, o no se han hecho realidad de la manera que creías, pero así es la vida, lo has ido aprendiendo a lo largo de todos estos años, no es ni mala ni buena, simplemente es.

Sinceramente pienso que eres una bella persona, con tus errores, ¡pero vamos a ver Juan! ¿Quién no ha cometido errores? ¡Espabila! Hace tiempo te dijeron a la cara que nadie pondría la mano en el fuego, ni si quiera por dicha persona, ¿y te culpas? ¿Cuánto has dado? También has perdido, pero al final aquí estamos y lo más maravilloso es eso, que estamos y las personas a las que hiciste daño y las que te hicieron daño también están. Y al final de todo, eso es lo importante.

Eras genial, eres genial y seguirás siendo genial, habrá personas que te quieran con tus virtudes y tus defectos y habrá otras que no, también habrá personas que te perdonen y otras que no, igual que tú, aunque sé que en el fondo de tu corazón una vez una persona entra esta ya jamás podrá irse, y sé que por mucha distancia que te separen de esas personas ahí estarán, envueltas en un bello sueño, en un plácido recuerdo de lo que fue, ¿pudo ser? Sí, pero eso se acabó, quédate con todo lo bueno, y piensa que al final de todo, ellos, siguen estando y, aunque no caminarán a tu lado a partir de ahora, es posible que sean felices, y esa es una suerte una gran y maravillosa suerte. De hecho, es milagroso que hayáis coincidido en este espacio-tiempo, en un indefinible suspiro de la historia del Universo, esos mágicos momentos jamás volverán, pero quedarán imborrables en vuestras vidas, ¿no es eso fascinante?

Juan, no seas duro contigo y aunque a veces no creas que haya esperanza en el futuro, sí la hay, al igual que la hubo en el pasado. Este mundo en el que vives es tan maravilloso como terrible, eres un afortunado de tenerte a ti, a tu familia y amigos y aunque a veces la vida se pueda convertir en un horror, al igual que en las grandes novelas en los que el héroe pelea contra todo peligro y oscuridad y se pregunta “¿cómo puede haber final feliz?” Ese héroe siempre continúa hacia adelante, podría abandonar todo, pero después de cada tormenta, cuando el sol brille, lo hará con más intensidad. Esos héroes sin capa también viven en tu mundo, lo sabes ¿verdad? Ellos tenían posibilidad en la vida real de no serlo, podrían haberse dado la vuelta cuando no tenían nada a lo que aferrarse, pero no lo hicieron…

Tú no eres un héroe o al menos no por ahora, tampoco hace falta que seas un héroe para que te quieran y aprecien, pero sí que necesitas ser algo más de lo que eres ahora. A veces es muy complicado ver las cosas con claridad, es posible que en ocasiones esa confianza que te hacía superar cualquier obstáculo, esa fuerza en la que nunca dudaste quede hecha añicos. No puedes perderte por doloroso que sea en la culpa y el arrepentimiento. Lo pasado, pasado es, ¡no se puede recuperar! Esos sentimientos, Juan, debes aprender a contenerlos, y sé sinceramente que la vida ya te empezó a enseñar todo eso hace mucho tiempo, ¡bien, bravo! Pero no debes olvidarlo y, aunque te puedas perder en el camino, aún tienes a tus amigos y familia, puedes tomarte un tiempo, es lícito, pero ellos te están esperando, yo también te estoy esperando. ¡Tienes que volver!

Es posible que nada importe, muy bien, es justo que puedas llegar a pensarlo, pero eso no cambiará el hecho de que a los demás les importe, por eso es crucial que hagas algo a ese respecto. Einstein dijo hace tiempo, que había dos maneras de ver la vida; “una como si nada fuera un milagro, la otra es como si todo lo fuera”. Sé que tu manera romántica de ver la vida ha ido muriendo con el paso de los años, quizás es lo que tiene ir haciéndose mayor, quizás es lo que hayas encontrado en este pasado año donde te recuerdo lo diste todo, pero tienes que aceptar que las cosas muchas veces, (por no decir siempre, o casi siempre) no salen exactamente como querrías, ¡cojones Juan que no tienes 7 años! Yo siempre te he querido, antes, durante y después de esta dialéctica contigo. Eres mi persona favorita, aunque en ocasiones te llegue a despreciar, pasa hasta en las grandes familias, entre los mejores amigos, pero al final del día aquí estaremos tú y yo, o lo que es lo mismo YO. Porque yo soy tú.

Durante mucho tiempo has ido promulgando que todos aquellos con los que has tenido contacto, para bien o mal, son los que han ido formando tu carácter, y sabes bien, que es así, cada interacción cada relación de amor, cada relación de amistad sincera, cada persona con las que has reído, discutido, llorado… Todo eso eres tú, todo eso soy yo, y desde esa perspectiva es interesante ver que puedes cambiar tu mundo. Está bien querer cambiar el MUNDO, pero lo que tienes que cambiar es tú mundo. Sabes cómo hacerlo, ya has visto cómo te quieren y es injusto lo que a veces haces para desacreditar lo que ellos ven en ti, porque sí ellos forman parte de ti, si ellos eres tú, tú también formas parte de esas personas, en sus corazones ahí estás tú. Oh sí, las personas pueden hacer daño... Pero tal y como yo lo veo puedes huir de las personas… o aprender de ellas.

Sé que no tienes maldad en tu corazón, aunque a veces te comportes como un pedazo de zoquete, puedes transformar y debes transformar ese dolor en amor. Estás en ello, lo reconozco, lo siento, pero ten cuidado qué es lo que amas, pues como ya hemos hablado el pasado está agotado. Da pena pensar como el tiempo marca una distancia tan cierta de aquellos momentos en los que fuimos felices, pero, aunque no se pueda repetir en el presente, y sí hablo de presente, es sumamente importante que conozcas que habrá momentos de extrema belleza de aquí en adelante. El futuro no existe Juan, no existe, es un lienzo en blanco, lo que ayer era oscuridad hoy es luz, pero hay muchas cosas que no están en tu mano, déjalas descansar en el recuerdo, vuelve a ellas cuando las necesites para coger fuerza en el siguiente segundo que marque tu existencia, pero jamás dejes que tiñan de desesperanza los mágicos momentos que están por venir, si aún no estás seguro de poder manejarlos de la manera en la que deberías.

Eres una persona fuerte, yo lo he visto, ellos también, pero tienes que sembrar de esperanza tu vida porque sólo de esa forma sembrarás de ilusión al mundo que te rodea, sólo así las personas serán felices a tu lado y tú serás feliz. ¿Dónde quedó aquel chico que decía que había decidido hacer felices a las personas que te rodeaban? ¡Qué sí, no seas hartible, que tampoco querías hacer daño! Pero chico, eso no es posible, aunque intentes actuar de la manera correcta la vida siempre pone zancadillas, y una misma acción incluso podría acarrear felicidad y tristeza a la par a personas que para ti son importantes, pero la vida es así, y en esa diatriba lo más importante eres tú, es decir, nosotros, Yo.

Tú, yo, nosotros, en este viaje que emprendimos hace ya tres décadas no dejas de ser la esperanza, anhelos y sueños de aquellos que no te conocieron, e incluso de aquellos que sí. Todas las personas pueden mejorar, y tenemos margen de mejora, pero no puedes extralimitarte ni pretender que el mundo idílico que está en tu mente se interponga en la realidad, porque jamás pasará. El tiempo, aunque sea nuestro peor enemigo, al final te dará respuestas que hoy quizás no tengas, lo sabes de sobra. No te precipites y vive el aquí y el ahora, procura ser el mejor Juan que puedas ser, date tiempo, pero no te escondas del mundo, no te van a rechazar cuando sepan quién eres, pero lo más importante en definitiva es que creas en ti, y que creas en ti no es pensar que todo saldrá como quieres que salga sino por el contrario, aceptar que las cosas pueden no salir como quieres y aun así seguir creyendo en esa estupenda persona que eres. Ese, y no otro, es el único modo de que seas quien debes ser, y de amarte a ti mismo, pues créeme si te digo, que al final de toda esta historia sólo quedaremos tú y yo. Para mí siempre serás la persona más importante de este mundo y con ello todo lo que albergas en tu corazón. Siempre te querré.